SENTIDO COMÚN
MINUTO DE SILENCIO
El mercadillo de los miércoles es una realidad en el barrio de Otxarkoaga desde hace muchísimos años. Personas de otros barrios, y del nuestro, acuden semanalmente a comprobar qué hay de nuevo en un concepto de comercio y de ahorro en el que lo bueno, bonito y barato tratan de conjugarse. Muchas familias del barrio trabajan en este tipo de mercadillo y ese montar y desmontar tenderetes todos los miércoles requiere un gran esfuerzo y dedicación. Sólo una pega. En el parque de Makaldi, que es donde se ubica, se colocan todos los miércoles media docena de contenedores especiales para recoger la basura que se genera en torno al mercadillo. El caso es que, uno no sabe muy bien por qué, cientos de bolsas de plástico, trozos de cajas cartón y otros desperdicios, quedan esparcidos por el suelo hasta que llegan los servicios de limpieza. A veces, cuando hay viento, llegan hasta la carretera que está al lado o se esparcen cientos de metros a la redonda sobre la hierba del parque y en las calles cercanas. No se trata solamente de una cuestión de estética. Hay comerciantes que recogen la basura en los contenedores, hay comerciantes que la tiran siempre al suelo. Es una cuestión de sensibilidad, o de sentido común, que es el menos común de los sentidos.
Pepe
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