Los contenedores quemados por vándalos son ya la mitad de los incendios en Bilbao

Casi la mitad de las intervenciones por fuego de los Bomberos en Bilbao en 2011, concretamente el 47,7%, se debieron a actos vandálicos de quema de contenedores (395), lo que supone un ligero incremento con respecto al año anterior, cuando se registraron 377. El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Bilbao, Tomás del Hierro, y el director del área, Andoni Oleagordia, lanzaron un llamamiento ayer durante una rueda de prensa para que disminuyan este tipo de sabotajes provocados, «que cuestan un dinero al Ayuntamiento», y revelaron que la Ertzaintza y la Policía Municipal de Bilbao está detrás de varios «pirómanos», aunque no pudieron ofrecer más datos porque entorpecerían la investigación. «Suelen tener comportamientos cíclicos. El pirómano por patología interviene en distintos lugares, pero no quiere ser detenido», explicó Oleagordia.
En segundo lugar, el mayor número de incendios se produjeron en viviendas (257), la mayor parte de ellos a la hora de comer o de cenar y relacionados con «descuidos» con ollas o pucheros, especialmente en el distrito de Abando y en el Casco Viejo. Los fuegos en edificios, por contra, descienden ligeramente con respecto a 2010 y también los daños provocados en ellos, pese a que el número de edificaciones en Bilbao ha ido creciendo en los últimos años. Los responsables municipales lo atribuyen a que «la gente está cada vez más concienciada», a la vigilancia de los inspectores y al aumento de las medidas de autoprotección en edificios y locales tanto públicos como privados.
El tiempo medio de llegada de los Bomberos de Bilbao es de siete minutos y 41 segundos, y el ratio de bomberos por cada 10.000 habitantes de 5,35, comparable al de otras ciudades como Madrid y por encima de la media europea. En la actualidad, el recientemente inaugurado parque de Miribilla se completa con el de Botika Vieja, situado bajo el puente de Deusto, para dar servicio a los barrios de San Ignacio, Deusto y Uribarri. Además, ahora «Txurdinaga y Otxarkoaga estarán mejor atendidos que antes, más rápido», afirmó Del Hierro.
Desprendimientos
El servicio de extinción de incendios, sin embargo, dedica la mayor parte de su actividad al salvamento (1.008 salidas, el 39,59%), en su mayoría rescates de personas mayores o impedidas (394), de animales (175) y desencarcelaciones en accidentes de tráfico (145), además de otros incidentes relacionados con la electricidad, el gas o el agua.
En 2011 se ha dado un leve incremento también de las asistencias técnicas, especialmente las relativas a desprendimientos de fachada (301). La mayoría de estas intervenciones se realizan en invierno y la principal causa suelen ser los fenómenos atmosféricos adversos, como el viento y la lluvia.
El SAMU también depende del área de Protección Civil del Ayuntamiento de Bilbao, aunque forma parte de la red de Osakidetza desde 2006. Las ambulancias municipales atendieron 6.243 urgencias médicas el año pasado. Casi la mitad de las salidas, el 48,5% fueron por enfermedad y un 19,9% por una caída casual, también hubo 334 intoxicaciones y 32 atropellos, según los datos de la memoria de 2011 hechos públicos ayer por los responsables municipales. El 57% de los pacientes que trasladaron las unidades del SAMU quedaron ingresados en los distintos centros hospitalarios.
A preguntas de los periodistas, Del Hierro explicó que el problema de humedad en el aire que provocó el traslado de la Unidad de Diligencias del nuevo edificio de Miribilla a otras comisarías, «está en vías de solución». Los policías sufrieron sarpullidos y problemas respiratorios a raíz de la mudanza. «Ha sido un fallo de ventilación y hemos reducido el nivel de humedad en el aire. Los agentes ya están de nuevo en Miribilla», anunció