Un equipo de policías de barrio por cada 20.000 habitantes

 Para generar un clima de confianza entre la población y los policías municipales es fundamental que se conozcan, se reúnan y colaboren en los distintos barrios, atendiendo a la idiosincracia de cada zona. En esto consisten precisamente los talleres de barrio, una de las medidas del Pacto de Seguridad cuya prueba piloto se está testando en Otxarkoaga y Rekalde. “En 2020 Bilbao tendrá un equipo de policías de barrios por cada 20.000 habitantes. Trabajarán de una manera personalizada y se implicarán en la resolución de los conflictos”, señaló el director de Seguridad Ciudadana, Adolfo Alustiza.

Los equipos de barrio estarán formados por un número determinado de vecinos, en función de la idiosincracia de la zona. Serán agentes estables con los que la ciudadanía establezca una relación más personal. Los equipos de barrio son propuestos por los distritos y se reúnen una vez al mes en la comisión de trabajo creada con los vecinos y una vez cada tres meses a puerta abierta.

El alcalde se comprometió en el foro de Seguridad celebrado en el Palacio Euskalduna a abrir un tercer taller en San Francisco antes de que acabe el presente año, pero en todo caso, Alustiza aseguró que todos los barrios tendrán estos equipos en 2020.

Ayer, el representante del taller de Otxarkoaga, Pablo Herrán, y de Rekalde, Miguel Gómez, junto al agente Patxi Blanquer dieron a conocer algunas de las cuestiones abordadas con los diferentes grupos de trabajo.

Los vecinos de Rekalde solicitan cambiar la iluminación que tiene una tonalidad más cálida por una luz clara que les da más seguridad. Los de Otxarkoaga quieren que los policías patrullen por su barrio andando y no en coche, y también se quejan de que los agentes paren a tomar café.