Bilbao ayudó el año pasado a 2.936 familias a eliminar barreras arquitectónicas en sus comunidades
on un parque inmobiliario tan envejecido como el de Bilbao, una ciudad con cada vez más gente mayor pero en la que todavía muchos edificios carecen de ascensor, a muchos vecinos subir a casa se les hace muy cuesta arriba. Así que el Ayuntamiento, a través del área de Urbanismo, intenta echarles un capote dedicando cada año una partida de ayudas que hagan más asequible hacer obras de adaptación en la comunidad. El año pasado, 2.669 viviendas situadas en 115 bloques se beneficiaron de estas subvenciones para cosufragar la instalación de ascensores o eliminar escaleras en espacios comunes y cambiarlas por rampas. En 32 bloques se puso ascensor, en 45 salvaescaleras y rampas y en otro se reformó la urbanización.
Urbanismo subvenciona el 10% del presupuesto de las obras, aunque en Otxarkoaga, la ayuda crece hasta el 20% del importe, con un máximo de 16.000 euros, «como consecuencia de las circunstancias socioeconómicas de su población y del mayor coste de las obras, al realizarse generalmente la instalación de los ascensores por el exterior de los edificios».
Últimos comentarios