214 cultos minoritarios en Euskadi
No demasiada gente conoce que los fieles de la Iglesia del Dios Vivo Columna y Apoyo de la Verdad (La Luz del Mundo) celebra todos los días el culto en unos locales de la calle Labayru de Bilbao, o que la Iglesia Evangélica de Filadelfia cuenta con 300 parroquianos en el barrio de Otxarkoaga. Tampoco es vox pópuli que un sacerdote llega cada tres meses con un visado de turista para oficiar misas en la iglesia Ortodoxa Georgiana de Vitoria y, transcurrido ese periodo, debe volver a la antigua república soviética para renovar el permiso. Son sólo tres ejemplos de las 214 comunidades religiosas minoritarias que cuentan con centros de culto en Euskadi y que «más o menos tímidamente» empiezan a aflorar en el espacio público.
Así lo reconoció ayer la consejera de Justicia y Administración Pública del Gobierno vasco, Idoia Mendia, durante la presentación del libro 'Pluralidades latentes' (Icaira Editorial) que, por primera vez, dibuja las características del espectro religioso en Euskadi más allá de la mayoritaria confesión católica. El libro traza un paisaje compuesto no sólo por iglesias regidas por la doctrina emanada de Roma, sino cada vez en mayor medida por mezquitas, salones del Reino o centros budistas, confesiones que practican el 2,1% de los creyentes y que «también demandan la atención de las administraciones públicas», reconoció la consejera.
Se trata, dijo Mendia, de una «primera aproximación en profundidad» a un asunto tan apasionante como cambiante» y que será utilizado por el Gobierno como herramienta para dar respuesta a las crecientes demandas en este ámbito «tan sensible». Según los datos del Centro de Investigaciones Sociológicas, si hace una década el 85% de la población se declaraba católica, en 2010 este porcentaje cayó al 72,7%. Además, el 25,4% de los jóvenes de entre 18 y 24 años se define como no creyente, mientras que dos de cada diez fieles lo son en confesiones minoritarias. «La religiosidad está cayendo pero ahora es más plural», apuntó el director del estudio, Eduardo Ruiz Vyeitez, quien recordó que la dicotomía clásica entre católicos o no católicos en Euskadi ha desaparecido.
«No siempre pacífica»
La publicación, fruto de una «intensa» labor de investigación desarrollada a lo largo de dos años por un equipo académico de la Universidad de Deusto y la Fundación Ellacuría, en colaboración con la Fundación Pluralismo y Convivencia, revela que la sociedad vasca es «plural en lo religioso», si bien esa realidad choca en ocasiones con el «rechazo o temor» de parte de la ciudadanía. La consejera no obvió la responsabilidad de las instituciones en una aproximación «no siempre pacífica» y cuya respuesta ante la diversidad religiosa puede ser calificada «cuando menos de irregular». Prueba de ello, recordó, son los recurrentes conflictos surgidos por la enseñanza de la Religión como asignatura en las escuelas públicas, la inclusión de una alimentación acorde con las creencias de los musulmanes, la habilitación de cementerios específicos, la utilización del velo en los espacios públicos…
De cara al futuro, según Mendia, el reto para el Ejecutivo es «fijar qué obligaciones deben ser asumidas por la comunidad política para no violentar la libertad religiosa de quienes son minoritarios». En este sentido, Mendia reconoció que el libro incluye unas «herramientas útiles» para intervenir en la resolución «pacífica» de este tipo de polémicas. Polémicas que, por otra parte, «hacen albergar serias dudas sobre la positividad con la que se percibe la diversidad religiosa en nuestro entorno», apuntó Ruiz Vyeitez
A lo largo de sus 300 páginas, el estudio permite conocer que el colectivo más numeroso entre las confesiones minoritarias es el constituido por el cristianismo reformado y evangélico, con 96 agrupaciones. En la pluralidad de los cultos inspirados en la figura de Cristo se describen comunidades como la Iglesia Adventista del Séptimo Día, los Testigos de Jehová o la Escuela Internacional de la Rosacruz Aurea. También ocupa un lugar destacado la religión islámica. que comienza a manifestarse a partir de los años 80. En un plano mucho más minoritario se encuentra el budismo tibetano , los mormones o la Iglesia de la Cienciología, entre otros.
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