Andoni Gago: “Soy todo corazón”

– Consiguió el sábado por la noche en el Vall d’Hebron de Barcelona su cuarto título Estatal ante Sergio Blanco. ¿Siente lo mismo que la primera vez?

-Siempre sientes lo mismo que en el primero, pero lo vives como las distintas fases de las peleas. Esta la he vivido fuera, he ido a casa del rival, vas, le ganas con coraje, con raza y con corazón y hace la misma ilusión. Traerse un cinturón siempre alegra.

Los dos primeros asaltos fueron de su contrincante.

-Sergio, El Maestrito, Blanco es un gran boxeador, es un superclase. El catalán tiene mucha experiencia y mucha clase. Los dos primeros asaltos, nos puso distancia con los movimientos laterales y nos combinaba. A medida de que iba avanzando la pelea, fuimos arrastrando. El físico me fue a más, combiné mejor y se vio que él iba bajando. Así pudimos ganar el combate.

Menos mal que lo pararon, porque todo apuntaba a que iba a haber mucha leña en contra de Blanco, ¿no?

-Sí. Nosotros teníamos el planteamiento de que ocho asaltos no nos iba a aguantar. El combate iba predeterminado a eso, a que no iba a aguantar. Nos equivocamos en dos asaltos y acabé antes. Mucho mejor.

Todo bajo el guion.

-Él es un superclase. En los primeros asaltos sabíamos que íbamos a tener que estar ahí, aguantando, que iban a ser para él. Pero también teníamos claro que había que ir para adelante y él iba a ir a menos y yo a más. Siempre boxeamos así. Después, pegó el bajón y pararon la pelea en el sexto. Entonces, ya se veía que le quedaba poca gasolina. Hubo mucho agarre, mucha bronca, pero le quedaba poco.

¿Pudieron celebrar el campeonato después de la velada?, porque usted también acabó con cortes.

-Sí. Una cenita. Cayó pollo con patatas, que hacía mucho tiempo que no comía (risas). Lo normal después de una pelea, siendo como es nuestro boxeo, en el que nos llevamos manos y nos gusta el cuerpo a cuerpo, es que acabas baldado y lo que apetece es descansar. Dejamos para el siguiente fin de semana salir a celebrarlo y a tomar algo.

Este combate demuestra que a Andoni Gago es muy difícil hacerle frente, ni siquiera fuera de casa y contra un rival experimentado.

-Eso esperábamos demostrar. Ahora queremos demostrar eso, sea en casa o fuera, queremos enseñar que aunque no seamos muy puristas en el boxeo, tenemos un gran corazón, tenemos ganas de seguir hacia adelante y a darlo todo.

¿Boxeador de corazón?

-Sí. Todo corazón.

Su siguiente objetivo debería ser el título europeo de los pesos pluma, una dura prueba, al haber conseguido ya cuatro Estatales.

-Yo lo que quiero es seguir yendo hacia adelante, progresando. Si puede ser Europa, pues genial. Mi objetivo es avanzar poco a poco, paso a paso. Si sale esto es que vamos avanzando y haciendo las cosas bien.

Le tocará cogerse un par de semanas de descanso.

-Una semana seguro que tomaremos. Veremos la velada de mi hermano Juan Alberto y Kerman Lejarraga en Miribilla a gusto, apoyándoles a fuego. Después de ese día, toca empezar con el trabajo físico activo y a ponerse bien.

Es usted inquieto.

-¡Estoy que lo tiro! Esto es trabajo y trabajo. Esto es constancia, sufrimiento y sacrificio. Si te gusta, adelante.

Cuatro títulos no los consigue cualquiera.

-Eso es. Estamos tratando de dar un empujón al boxeo vasco.