PROPUESTA DE CIERRE DEL AMBULATORIO LOS SÁBADOS

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Osakidetza cerrará la mitad de los ambulatorios que abren los sábados por la mañana para concentrar la atención sanitaria en los centros más importantes de cada zona. La propuesta planteada por los responsables del Servicio Vasco de Salud para «reorganizar» la asistencia que se presta los fines de semana y festivos en la comunidad autónoma vasca contempla la clausura de 46 de los 104 ambulatorios que permanecen abiertos en la actualidad desde las 9.00 hasta las 14.00 del sábado, un proyecto prácticamente idéntico al planteado por el anterior Gobierno Vasco pese a ser muy criticado por el PSE cuando estaba en la oposición.
Tras la polémica surgida entonces por el anuncio del cierre de los centros de salud, los nuevos gestores han retomado la iniciativa planteada por Gabriel Inclán para «reorganizar» la asistencia sanitaria. Seis alcaldes socialistas -Barakaldo, Sestao, Portugalete, Basauri, Ermua y Trapagaran-, algunos de ellos destacados miembros de la ejecutiva del partido ahora en el poder, exigieron a los anteriores responsables de la consejería que diesen «marcha atrás» en su propuesta e incluso llegaron a publicar un comunicado conjunto en el que aseguraban que no se podía «permitir que el ahorro económico se esté convirtiendo en el principal objetivo, casi en el único, de los actuales gestores de Osakidetza».
En un escenario de crisis económica y fuerte contención del gasto, la propuesta presentada a los sindicatos en la última mesa sectorial contempla la «clausura de los centros con menor actividad asistencial» dentro de la política de austeridad impuesta por la dirección del Servicio Vasco de Salud.
A diferencia del proyecto elaborado por la anterior consejería, Osakidetza ampliará la cobertura sanitaria del resto del fin de semana para compensar el cierre de los ambulatorios los sábados por la mañana con la apertura de 44 Puntos de Atención Continuada (PAC), nueve más de los que funcionan en la actualidad. «La asistencia sanitaria que se presta a los usuarios durante las 48 horas del fin de semana se distribuye de manera más homogénea. La accesibilidad a los centros disminuye los sábados de 9.00 a 14.00 horas, pero también es cierto que aumenta desde esa hora hasta las ocho de la mañana del lunes», explicaron fuentes del departamento dirigido por Rafael Bengoa.
En cualquier caso, el cierre de ambulatorios obligará a miles de pacientes de toda la comunidad a cambiar su centro habitual para poder ser atendidos por un médico sin tener que recurrir a las urgencias hospitalarias, con el trastorno que ello conlleva para las personas mayores y familias con niños pequeños. Los vecinos de la capital vizcaína pasarán de una veintena de consultorios abiertos los sábados por la mañana -prácticamente uno por barrio- a nueve centros. Estos ambulatorios absorberán la demanda asistencial de toda la capital vizcaína, con más de 350.000 habitantes. El cierre de consultas se compensará con la apertura de cinco Puntos de Atención Continuada -Begoña, Deusto, Rekalde, Indautxu y Santutxu-, tres más que ahora.
En el caso de la Margen Izquierda, miles de pacientes tendrán que desplazarse a otras localidades de la comarca para ser poder ser atendidos por un médico al cerrar la persiana seis de los quince centros que funcionaban hasta ahora los fines de semana, mientras que los PAC de Zaballa y Ortuella estarán abiertos las 48 horas, como ya lo hacían los de Sestao, San Juan de Dios, Zalla, Balmaseda y Carranza. La comarca de Uribe pierde cinco centros, al igual que los usuarios de los municipios del interior de Vizcaya.
Crítica de los sindicatos
Álava es otra de las comarcas que más notará los efectos de esta medida al clausurar diez de los trece ambulatorios que abren los sábados -Abetxuko, Arambizkarra I y II, Casco Viejo, Gazalbide, La Habana, Lakua-Arriaga, Lakuabizkarra, Olarizu, Sansomendi, Zaramaga e Iruña de Oca-. Los vitorianos podrán acudir a los centros de salud de San Martín y Olaguibel, que estarán de guardia todo el fin de semana, al igual que el de La Llanada. La decisión adoptada por la consejería dirigida por Rafael Bengoa dejará también a los pacientes guipuzcoanos sin diez de los 33 consultorios que abren los sábados por la mañana.
Los sindicatos no han recibido con buenos ojos la propuesta planteada por los responsables de Osakidetza al entender que «empeora las condiciones laborales del personal que trabaja los fines de semana».